El director de Trasplantes del Hospital Auxilio Mutuo de San Juan de Puerto Rico y testigo del huracán María ha reconocido en Herrera en COPE que «están viviendo momentos de mucha tensión».
Juan Vicente del Río ha contado que la zona se encuentra totalmente inundada. «Soy uno de los pocos afortunados que tiene generador y luz, y puedo comunicarme con el mundo exterior. Las ventanas de los edificios de alrededor han volado, los árboles caídos cortan las vías del paso y los cables están por el suelo».
«Hay un silencio sepulcral. No se escucha el viento, ni las aves, ni los coquíes», afirma Juan del Río. Y añade que «la recuperación de la zona va a llevar meses. Por suerte no deja de ser un territorio americano, por lo que vendrá toda su fuerza para ayudar. Este apoyo va a ser fundamental».
El doctor señala que, a pesar del toque de queda que se ha implantado, «en caso de emergencia vendrán a por mí». «El huracán hizo estallar muchas ventanas, y el centro de trasplantes ha quedado devastado, es como una zona de guerra», pero afortunadamente añade «la zona con los pacientes más graves ha quedado intacta. Mucho personal ha estado encerrado en el hospital, y ahí seguirá hasta que se pueda hacer algún relevo».