El 1 de noviembre de 2017 se cumplirán 200 años del nacimiento de la Congregación de Hermanas de Nuestra Señora de la Compasión.

 

Según explican las Hermanas, este Año Jubilar de celebración se convoca para: «Agradecer el don de estos 200 años de historia, dando gracias a Dios por ella;  celebrar gozosamente el presente de nuestra vocación y la belleza de la Compasión que sigue atravesando nuestro mundo; abrirnos al futuro, lanzándonos de nuevo a la Misión desde la esperanza que cultivamos cada día».

 

La orden fue fundada el 1 de noviembre de 1817 en Toulouse, Francia, por el venerable padre Mauricio Garrigou, sacerdote canónigo de esa diócesis, junto con la cofundadora, la madre Juana María Desclaux. Estas dos personas extraordinarias, se encontraron, se comprendieron y tuvieron la evidencia de que iban a realizar lo que Dios quería.

 

El padre Garrigou sería el Superior de la Congregación que acababa de nacer: Sœurs de Notre Dame de la Compassion. El fin de la Congregación sería la santificación de sus miembros por la práctica de las virtudes religiosas, la educación cristiana de las jóvenes y el alivio de los pobres por todos los medios posibles.

 

Se da la circunstancia de que la primera comunidad en España, de las religiosas de Nuestra Señora de la Compasión nació en Erandio, Vizcaya.

 

Las monjas, tanto en Erandio como en Basauri, participan y colaboran en diversas tareas pastorales y sociales de la diócesis «donde se defiende la dignidad de la persona y el cambio de la sociedad». De este modo, acompañan en ámbitos de acogida y atención a inmigrantes y refugiados por medio del programa ‘Izangai’ o en pisos o albergues de inserción social de ‘Lagun Artean’ o en proyectos con personas privadas de libertad ‘Adsis’.

 

El cierre de este bicentenario tendrá lugar el día 1 de noviembre de este año en Toulouse.