El grupo de misioneros que salieron de Córdoba el jueves 6 de julio con destino Perú, se encuentra ya en la prelatura de Moyobamba, donde está llevando a cabo numerosas tareas pastorales y de servicio. El grupo, formado por el sacerdote Miguel Varona, párroco de San Pelagio Mártir de Córdoba, y nueve laicos, han ayudado en los primeros días en la limpieza y últimos arreglos del nuevo centro parroquial Nuestra Señora de la Fuensanta que ha patrocinado el Cabildo Catedral y que ha sido bendecido este lunes. Con este centro parroquial se mejorará la atención a 132 poblados que conforman la provincia de Picota-San Martín.

Otro de los proyectos que ya está finalizado es el nuevo oratorio de La Trinidad situado en el distrito de Pilluana, en Picota, donde el pasado domingo ya se celebró la primera misa. La capilla ha sido financiada por la comunidad parroquial de San Juan y Todos Los Santos (La Trinidad) de Córdoba y ha supuesto un coste de 18.000 euros.

Asimismo, entre otros quehaceres diarios los misioneros participan de actividades de animación misionera, atención médica, han celebrado un retiro espiritual, catequesis, y durante estos días se desplazarán a la selva para continuar allí su tarea misionera. Los misioneros regresarán a España el próximo 10 de agosto.

Desde hace varios años, la diócesis de Córdoba se encuentra vinculada a tierras peruanas, concretamente, a la misión de Picota, donde dos sacerdotes cordobeses y unas religiosas obreras llevan a cabo una gran actividad pastoral y humanitaria.