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Miércoles, 01 junio 2016 09:08

La Asamblea en Roma de las OMP: despertar la conciencia misionera

La Asamblea en Roma de las OMP: despertar la conciencia misionera

Desde este lunes está teniendo lugar en Roma, la Asamblea General de las Obras Misionales Pontificias (OMP), que ha reunido a los directores nacionales llegados de todo el mundo. La primera parte de esta Asamblea anual, la parte pastoral, está dedicada al tema general de este año: Despertar la conciencia misionera hoy. Las OMP al servicio de las Iglesias jóvenes.

Para comenzar esta parte pastoral, contaron con la presencia de cuatro animadores misioneros, que compartieron su experiencia con los participantes: Sor Lucía Premoli, Superiora General de las Misioneras Combonianas, expuso su experiencia de animación misionera llevada a cabo en Brasil; el padre Kodithuwakku Indunil Janakaratne, subsecretario del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, presentó los rasgos de la misión en un contexto interreligioso; el padre Wenceslaus Kwindinwgi, Misionero de Marianhill, habló de su experiencia misionera con pequeñas comunidades cristianas en África, con una referencia especial a Zimbabue y a Sudáfrica; mientras que el padre Sócrates Mesiona habló de sus vivencias como Director Nacional de las OMP en Filipinas y su aportación a la animación misionera.

Tras estos testimonios, se desarrollaron cinco talleres en los que se abordaron cinco rasgos de este tema general, «el despertar de la conciencia misionera». Los directores nacionales divididos en grupo aportaron su visión en torno a: 1) La misión en las jóvenes Iglesias, entre testimonio y martirio; 2) repensar y renovar la naturaleza y la misión del Pontificia Unión Misional; 3) los desafíos de la pluralidad religiosa y las preocupantes amenazas del integrismo étnico, religioso y cultural; 4) los contextos de pobreza (periferias, emigrantes, prófugos, perseguidos, refugiados); 5) los nuevos contextos culturales y pastorales en torno al matrimonio y a la familia.

Tras esta primera sesión de los talleres, tuvo lugar la intervención del prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, el cardenal Fernando Filoni. Expuso algunos rasgos «genéticos» de las Obras Misionales, y en especial la connotación evangélica y apostólica que las vuelven únicas respecto a cualquier otra iniciativa de tipo solidario o filantrópico humanitario. Por ello, pidió que el centenario de la Pontificia Unión Misional – la Obra que se considera el alma de las otras tres – fuera una oportunidad para comenzar un proceso de replanteamiento y renovación de toda la realidad de las Obras Misionales Pontificias, de manera que se evite que se conviertan en un mero instrumento de recogida de fondos. Sólo así se podrá «el preocupante enfriamiento eclesial en torno a la misión, la formación misionera y la evangelización como tal, que se registra en tanto en las Iglesias de antigua tradición, como en las Iglesias más jóvenes, que parecen, a veces, demasiado preocupadas por organizarse administrativamente, replegándose excesivamente sobre sí mismas». Sugirió, en consecuencia, que se pudiera confiar a las Pontificia Unión Misional «tareas de formación permanente y misionera al servicio de las jóvenes Iglesias».

Tras el cardenal Filoni, tomó la palabra monseñor Protase Rugambwa, presidente de las Obras Misionales Pontificias, incidió también en la renovación de la Pontificia Unión como un proceso que beneficiará a la identidad del conjunto de las Obras Misionales Pontificias. Presentó una síntesis de las actividades llevadas a cabo en el último año y, finalmente, habló del proceso de revisión de los estatutos de las mismas, para lo que la Asamblea general tendrá que marcar las apropiadas directrices.