El sábado 17 de diciembre tendrá lugar en la Misión de San Rafael Arcángel, en California, Estados Unidos, la celebración del bicentenario de esta misión, una de las misiones franciscanas fundadas por misioneros de la talla del recientemente canonizado Fray Junípero Serra.
La hoy Parroquia de San Rafael está localizada en el centro de la ciudad de San Rafael, a la que la misión dio nombre. Se fundó en 1817 como «Misión de San Rafael Arcángel», y fue la número 20 de las 21 misiones que fundaron los franciscanos en California. Sigue manteniendo la multiculturalidad y el plurilingüismo que caracterizó a estas misiones desde su fundación, por lo que en sus celebraciones y actividades caritativas colaboran residentes de toda la vida de la ciudad y recién llegados. Desde su fundación y desde que se convirtiera en parroquia, en 1884, la misión ha jugado un importante papel en el desarrollo de la ciudad de San Rafael y del condado donde está enclavada, el condado de Marin.
La celebración será presidida por el arzobispo de San Francisco, monseñor Salvatore Cordileone. El nombre mismo de la diócesis que preside Mons. Salvatore lleva también el sello de los misioneros franciscanos, puesto que también surgió de una de las misiones fundadas por ellos.
El franciscano mallorquín Junípero Serra llegó a California en 1760 y comenzó con sus compañeros misioneros la fundación de la primera de las misiones, San Diego. Seguirían otras que darían lugar a grandes ciudades como Los Ángeles, San Francisco, San Antonio, San José... Aunque la impronta «franciscana» en California no sólo se limitó a las ciudades: el valle que recorre como una gran cicatriz de 700 kilómetros su geografía es el Valle de San Bernardino. Están también las islas de Santa Cruz, Santa Rosa, San Miguel... Los canales de San Pedro o Santa Bárbara o las montañas de San Rafael.
Como recordó el Papa Francisco hablando de Fray Junípero, pero que se puede aplicar a las decenas de misioneros franciscano que dieron su vida llevando el Evangelio a California: «¿Qué fue lo que llevó a fray Junípero a abandonar su patria, su tierra, su familia, la cátedra universitaria y su comunidad franciscana en Mallorca, para ir hacia los extremos confines de la tierra? Sin duda, la pasión por anunciar el Evangelio ad gentes, o sea el ímpetu del corazón que quiere compartir con los más lejanos el don del encuentro con Cristo: el don que él mismo en un primer momento había recibido primero y experimentado en su plenitud de verdad y belleza».