Carlos Herrera ha asegurado en Sevilla durante la presentación de su tercera temporada en COPE, que «vamos a luchar por ser los mejores», en un año en el que asegura «vamos a reír y seguramente a pelear». Herrera ha resaltado alguna de las novedades con las que contará el programa, que se emite de lunes a viernes de 6 a 13 horas y en el que «habrá más tiempo para las historias humanas, las que queremos escuchar».
Aunque ha reconocido que no sabe dónde estará la siguiente temporada porque su principal idea es «pasar a la reserva», ha insistido en que «no sé si COPE me necesita a mí, pero yo sí que necesito a COPE»; «he vuelto a mi casa» porque «su ideario está basado en el humanismo cristiano, en perdonar, en compartir, en abrazar y en escuchar a todos».
Herrera ha recordado a los asistentes al acto, entre los que se encontraba la presidenta de la Comunidad, Susana Díaz, y las personalidades más relevantes del mundo de la política, la sociedad y la economía, la importancia de realizar un programa con aspiración al liderazgo desde la capital andaluza en estos momentos convulsos que se viven en Cataluña.
Aclara que «tiene un significado especial en estos tiempos» porque «lo que muchos puedan conseguir mediante carácter nominativo o diferenciado, también lo queremos nosotros. Los andaluces podemos ser más nación que nadie. Luchando por Andalucía luchamos por España y por la España que más nos conviene a todos».
Por su parte, el presidente del Grupo COPE, Fernando Giménez Barriocanal, ha destacado que Carlos Herrera «ha entrado por la puerta grande, consiguiendo lo que nadie en la radio de este país había hecho» y asegura que «todavía le quedan muchas tardes de gloria en esta plaza que es la radio».
Giménez Barriocanal señala que el presentador de Herrera en COPE «está en su mejor momento profesional y lo único que nos preguntamos es cómo pasará a la historia en esta tercera temporada». No duda de que será el líder indiscutible de las mañanas radiofónicas, porque «tiene una intuición especial para saber estar donde está la gente».