Más de 450 profesionales especializados en la organización de peregrinaciones y viajes religiosos se dieron cita esta pasada semana en Fátima dentro de las jornadas organizadas por la Cámara de Comercio de Ourem. Todos ellos, venidos de diferentes países del mundo, pudieron descubrir de primera mano los encantos y atractivos de Montserrat, su rico patrimonio artístico, histórico y natural que hacen que sea un verdadero museo al aire libre.
Fátima (Portugal), 13 de marzo de 2017. Durante los pasados días 9 y 10 de marzo se celebró en Fátima la quinta edición del Workshop Internacional de Turismo Religioso, evento organizado para los profesionales turísticos especializados en Turismo Religioso. Fueron dos intensas jornadas que dieron lugar a múltiples reuniones, encuentros y ponencias entre agentes de viaje, hoteleros, transportistas y otros prestatarios de servicios. Entre las agencias organizadoras de peregrinaciones, empresas tan importantes como Brevivet y Evviva Viaggi de Italia, Bipel de Francia, Peregrinaciones.mx de México, Marian Pilgrimages de Irlanda o Hermes Travel, Orbi y AVE Biuro Pielgrzymkowe de Polonia.
En cuanto a los destinos y municipios que se dieron cita, el Santuario de Montserrat (compartiendo stand con sus santuarios hermanos de Ruta Mariana) fue uno de los que más interés despertó, sobre todo en agencias sudamericanas, italianas y polacas. Montserrat se ha convertido en los últimos años en uno de puntos fuertes de los circuitos religiosos. Cerca de 2,5 millones de personas visitan cada año el recinto. Los responsables desplazados hasta Fátima pudieron mostrar a los profesionales los diferentes espacios y puntos fuertes con los que cuenta Montserrat, algunos de ellos poco conocidos aún en ciertos mercados internacionales. El Museu, con obras de Monet, Picasso, Dalí o Caravaggio, el conjunto de esculturas modernistas al aire libre más importante de Cataluña, las magníficas vistas sobre el monasterio y la montaña que se consiguen a través del teleférico o las diferentes posibilidades de restauración y alojamiento para los grupos, fueron reclamos y aspectos que calaron entre los agentes de viaje y organizadores.
Tras esta edición, con un considerable aumento de participación respecto a pasadas ediciones tanto de empresas como de destinos, Fátima se confirma como una de las grandes ferias europeas del turismo religioso, una cita a tener en cuenta en el calendario del próximo año.