El primado de la Iglesia ortodoxa ucrania, fiel al Patriarcado de Moscú, el metropolita Onufry (Berezovsky) de Kiev, hizo un pedido para que se ponga fin a la guerra y en el período de Carnaval se substituyan las diversiones con el ayuno y la oración.
Los líderes de Ucrania, Rusia, Francia y Alemania anunciaron ayer un acuerdo de alto al fuego en el este de Ucrania. Tras más de 15 horas de conversaciones ininterrumpidas en Minsk, el presidente Vladímir Putin afirmó que se logró un consenso "sobre las cuestiones principales" y que el alto al fuego entrará en vigor el 15 de febrero.
El primado ortodoxo recordó que hace un año en la plaza de la Independencia de Kiev, símbolo de la protesta contra el entonces presidente Viktor Yanukovichi, fueron asesinadas un centenar de personas en los enfrentamientos con las fuerzas del orden. “Aquellas víctimas fueron el inicio de una tragedia aún más grande que hizo del año pasado un página ensangrentada de la historia de Ucrania”, declaró el metropolita Onufry.
“Junto a miles de viudas y huérfanos, de madres desconsoladas por la muerte de los mejores hijos de Ucrania, muertos en las regiones orientales del país, junto a todos los necesitados y a los inválidos, junto a quien perdió su propia casa, rezamos a Dios que nos done sabiduría y amor cristianos a todos aquellos, de los cuales depende el fin de este terrible esparcimiento de sangre”, se lee también en el mensaje.
Recordando que se está entrando a la semana del Carnaval (en ruso se llama “maslenitsa), que precede a la Cuaresma. Onufry anunció que la Iglesia ortodoxa ucraniana cancelará todos los festejos, que normalmente se tienen en este período. “Pido a los representantes del mundo del arte y de la cultura, de los medios de comunicación y a todos los connacionales, para que adhieran a esta iniciativa, concluyó, ahora no es tiempo de diversiones y fiestas, sino tiempo de ayuno y oración, tiempo de remisión de los pecados por el futuro de nuestra nación, Ucrania y de sus descendientes”.
En los últimos días, el papa Francisco realizó diferentes llamamientos a todas las partes implicadas para pedir la paz en Ucrania. Asimismo, ha invitado a los fieles a rezar por los muertos y los heridos a causa de la violencia.
Hasta la fecha, el conflicto en el Este del país se ha cobrado cerca de seis mil muertos y ha provocado al menos un millón y medio de desplazados.