Al menos 230 personas murieron y otras cien quedaron heridos este viernes 24 de noviembre luego de que unos hombres abrieran fuego e hicieran explotar una bomba contra una mezquita en el norte de la península del Sinaí, en Egipto.
Fuentes policiales dijeron a The Associated Press (AP) que hombres en cuatro vehículos abrieron fuego contra los musulmanes dentro de la mezquita mientras se llevaba a cabo un sermón.
El lugar donde ocurrió el atentado, según narraron tres policías a AP, fue la mezquita al-Rawdah en la ciudad de Bir al-Abd, que se encuentra a unos 40 kilómetros de la capital provincial de el-Arish, en el norte de Sinaí.
Los oficiales de policía informaron también, que las víctimas fueron llevadas a hospitales locales y agregaron que los militantes del ISIS habían bloqueado las rutas de escape de la zona volando coches y las carreteras.
El P. José M. Gil Tamayo, Secretario General de la Conferencia Episcopal Española, no dudó en enviar sus condolencias por el atentado y pedir oraciones a todos los fieles.
«Nuestro pesar y oración por las numerosas víctimas del atentado en la mezquita del Sinaí egipcio así como nuestra condena de todo acto terrorista», indicó el sacerdote a través de su cuenta de Twitter.