Los nueve cardenales miembros del grupo que asesoran al Papa Francisco desde abril de 2013 para la reforma de la Curia del Vaticano, se han reunido de nuevo del lunes 12 al miércoles 14 de junio.
En rueda de prensa, el portavoz y director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Greg Burke, informó de que han abordado, entre otros asuntos, cómo la Curia romana puede servir mejor a las Iglesias locales. «Por ejemplo, una consulta más amplia, constituida también por miembros de la vida consagrada y laicos, que participen en los candidatos propuestos para el nombramiento de obispos», afirmó.
También hablaron de la posibilidad de transferir algunas facultades de los dicasterios a los obispos locales y a las Conferencias Episcopales «en un espíritu de sana descentralización». Un ejemplo sería «llevar del dicasterio para el Clero a la Conferencia Episcopal la cuestión del examen y la autorización para que un diácono permanente no casado, o un diácono permanente que haya quedado viudo, para pueda acceder a la ordenación sacerdotal».
Por otro lado, conversaron sobre distintos dicasterios y congregaciones de la Curia, entre ellos la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, el dicasterio para el Diálogo Interreligioso; el de las Iglesias Orientales; el que se ocupa de los Textos Legislativos o el Tribunal de la Rota Romana.
Como es habitual, el cardenal George Pell, presidente de la Secretaría Económica de la Santa Sede, informó de las últimas novedades respecto a la economía del Vaticano.