La imagen peregrina de la Virgen de Fátima será enviada de Portugal a Siria para llevar consuelo a los cristianos de Alepo, una de las ciudades más golpeadas por la guerra. Para el arzobispo maronita, monseñor Joseph Tobji, la protección de esta advocación mariana tiene una gran importancia para el fin de la guerra en el país.
El pasado 13 de octubre, para cerrar la última peregrinación internacional en el Santuario de Fátima de este año, el Obispo de Leiria-Fátima, monseñor Antonio Marto, bendijo una imagen de la Virgen de Fátima que será enviada a la «diócesis mártir» de Alepo.
Monseñor Tobji, que llegó a Damasco para reunirse con los demás obispos sirios, declaró a la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada de Portugal (AIN) que «es muy importante recibir la imagen porque eso significa que la Reina de la Paz protege, con su intercesión, a nuestro país, la amada Siria martirizada».
El ofrecimiento de la imagen, según el Santuario de Fátima, fue en respuesta a un pedido hecho por monseñor Tobji al rector, el P. Carlos Cabecinhas.
El arzobispo maronita afirmó que se necesitan oraciones por la gente de Alepo, «sobre todo a la Santísima Virgen María. Especialmente ahora que en 2017 se celebrará el centenario de las apariciones».
Monseñor Joseph Tobji subrayó que el envío de la imagen a Siria «tiene un doble significado, porque además de su intercesión, le pedimos a la Virgen por nuestra conversión, la de nuestra Iglesia y de todo el mundo».
La situación en la que se encuentra sumida Siria desde hace más de cinco años por la guerra ha causado preocupación en la comunidad internacional y ha llevado a la Iglesia a lanzar varios llamados para que haya un acuerdo y se termine el conflicto.
En ese sentido, AIN organizó el martes pasado una Jornada de Oración a nivel internacional que movilizó a miles de niños en varios países. También tuvo una enorme participación de la comunidad cristiana en Siria, especialmente en la ciudad de Alepo.
Monseñor Tobji destacó la grandeza de ese gesto, una vez que «la oración de los niños por la paz en Siria significa la unión del cuerpo místico de la Iglesia con uno de sus miembros que está enfermo y que carga la cruz, la de la guerra».
«Esta oración también es un pedido de gracia a la Santísima Virgen María, sobre todo simbolizada en la Reina de Fátima».
Traducido por María Ximena Rondón. Publicado originalmente en ACI Digital.