El Papa Francisco envió un telegrama al nuevo Presidente de Francia, Emmanuel Macron, en el que le felicita por su elección y en el que muestra su deseo de que su país se mantenga fiel a la tradición cristiana y a la construcción de una sociedad más justa.
«Pido a Dios que le sostenga para que su país, con fidelidad a la rica diversidad de sus tradiciones morales y de su herencia espiritual marcada también por la tradición cristiana, incluya siempre la preocupación por la construcción de una sociedad más justa y fraternal».
En el telegrama, el Santo Padre también valoró «el respeto a las diferencias y a la atención a las personas en situación precaria y de exclusión, y de aquellos que contribuyen a la cooperación y a la solidaridad entre las naciones», y pidió que ese rasgo que caracteriza a la sociedad francesa se mantenga y potencie.
El Pontífice animó al nuevo Presidente de la República Francesa a trabajar para «que Francia continúe favoreciendo, en el seno de Europa y del mundo, la búsqueda de la paz y del bien común, el respeto a la vida y la defensa de la dignidad de cada persona y de todos los pueblos».
Finalmente, Francisco concluye su telegrama impartiendo su bendición al nuevo mandatario y al pueblo francés: «Sobre su persona y sobre todos los habitantes de Francia, pido de todo corazón la bendición del Señor».
Emmanuel Macron, de 37 años, juró su cargo como 25º Presidente de la República Francesa el pasado domingo 14 de mayo tras resultar elegido en el proceso electoral que se celebró los días 23 de abril y 7 de mayo.
Después de haber sido Ministro de Economía en el gobierno socialista de su predecesor François Hollande, se escindió del Partido Socialista Francés para fundar su propia candidatura a la Presidencia bajo la candidatura denominada ¡En Marcha!, de ideario liberal.