El director de la Oficina de prensa de la Santa Sede, Greg Burke, indicó este lunes por la tarde en una nota, que «el jueves próximo, 8 de junio, el santo padre Francisco, recibirá el audiencia al Consejo de la Presidencia de la Conferencia Episcopal de Venezuela».
«El encuentro ha sido solicitado por la misma Conferencia Episcopal que desea hablar con el Papa sobre la situación de Venezuela», concluye la misma.
En la web de los obispos venezolanos se lee:
El próximo jueves 8 de junio la presidencia de la Conferencia Episcopal Venezolana integrada por monseñor Diego Padrón, presidente de la CEV; monseñor José Luis Azuaje, primer vicepresidente de la CEV; monseñor Mario Moronta, segundo vicepresidente de la CEV; monseñor Víctor Hugo Basabe, secretario general y los cardenales Jorge Urosa Savino y Baltazar Porras, presidentes honorarios, se reunirán en audiencia privada con el Papa Francisco en el Vaticano.
La reunión servirá para expresar al Papa Francisco, de viva voz, la grave situación que se vive en Venezuela, ya conocida por el Papa a través de la Nunciatura Apostólica. Sin embargo, es una oportunidad para que el episcopado venezolano hable al Papa Francisco de manera detallada sobre la crisis en la que está inmersa el país.
También será una ocasión para expresar lazos de solidaridad y agradecer al Papa Francisco sus oraciones, cercanía y preocupación por Venezuela, como lo ha expresado la Conferencia Episcopal Venezolana en las diversas exhortaciones y comunicados «Reiteramos nuestra adhesión, comunión y obediencia al Santo Padre Francisco. Agradecemos de corazón su constante acompañamiento: muestra de su preocupación por esta Patria donde se le quiere y respeta. Nos alienta su mensaje del pasado 5 de mayo, en el cual nos asegura que está “siguiendo con preocupación la situación del querido pueblo venezolano ante los graves problemas que le aquejan” y, que, a la vez siente “un profundo dolor por los enfrentamientos y violencia de estos días, que han causado numerosos muertos y heridos, y no ayudan a solucionar los problemas, sino que únicamente provocan más sufrimiento y dolor”. Lamentamos la tergiversación y manipulación que diversos actores han hecho de sus palabras» (43 Asamblea Extraordinaria de la CEV).
El último comunicado de la CEV, del 18 de mayo de 2017, ratificó el llamado a cumplir la Constitución y adhirió al pedido de elecciones como una solución a la crisis, tras reiterar que la población venezolana espera el cumplimiento de las condiciones aceptadas pero incumplidas: apertura de canal humanitario, elecciones generales, libertad de presos políticos y respeto a la Asamblea Nacional.
Por otro lado, el 19 de mayo pasado en Venezuela, monseñor Diego Padrón Sánchez, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, en el momento de recibir a la Comisión organizadora de la Asamblea Nacional Constituyente, señaló que la Asamblea Constituyente que propone el gobierno «es innecesaria», porque Venezuela cuenta con una de las constituciones más completas del mundo, en cambio «lo que necesita y reclama el pueblo, en primer lugar, es comida, medicinas, seguridad, paz y elecciones justas».