El Santo Padre expresó sus condolencias a las personas afectadas por el «bárbaro ataque en Teherán», que se registró este miércoles 7 de junio, lamentando lo que calificó de «absurdo y grave acto de violencia».
Lo hizo en un telegrama enviado a través de su secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolín, difundido este viernes por la Oficina de prensa del Vaticano.
«Al expresar su dolor por las víctimas y sus familiares, Su Santidad encomienda las almas de las personas fallecidas a la misericordia del Altísimo, y asegura al pueblo de Irán sus oraciones por la paz», indica el texto.
Los dos ataques en la capital de Irán, uno en el Parlamento y el otro en el mausoleo del fundador de la República Islámica de Irán, Ayatolá Ruholá Jomeiní, dejaron 17 muertos y 52 heridos y fueron reivindicados por el Estado Islámico. La célula terroristas había participado en combates en Irak y Siria, con un grupo yihadista antes de volver a su país el año pasado, indicó el Gobierno.