Los obispos de México han agradecido al papa Francisco por su reciente visita a su país, al mismo tiempo que se comprometen «a reflexionar las palabras que nos dirigió y a esforzarnos para asumir los retos que tan sabiamente delineó, procurando reflejar a todos la ternura de Dios». El Santo Padre visitó el país azteca en el que fue el duodécimo viaje internacional de su pontificado, del 12 al 18 de febrero. La Conferencia Episcopal Mexicana (CEM), se muestra consciente «de que la gratitud debe traducirse en compromiso» y por eso invitan a todos «a reflexionar en los mensajes que el Papa nos dirigió y a ponerlos en práctica, confiando en la ayuda de Dios y en la intercesión de la Virgencita de Guadalupe».
Con un comunicado firmado por el cardenal José Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara y presidente de la CEM, agradecen al Pontífice «por su oración, sus gestos, sus palabras y su testimonio, que nos han transmitido la ternura de Dios». Así como también por recordarles «que la Virgencita, que ha acompañado y acompaña la gestación de esta bendita tierra, nos invita a levantar la vida de todos los mexicanos».
Por otro lado, se muestran agradecidos por «compartir nuestros sufrimientos y ayudarnos a valorar nuestro patrimonio, nuestras raíces y nuestra cultura e identidad, para proyectarnos hacia el futuro». Gracias –añaden los obispos mexicanos– por hacernos ver que México es un gran país, y que aunque la noche parezca enorme y oscura, existen muchas luces que anuncian esperanza.
En el mensaje publicado este lunes, la CEM da las gracias al Papa por animarles «a forjar en el presente un futuro esperanzador, empeñándonos en el bien común, siendo justos, honestos y solidarios».
Además de agradecer a Dios y al Papa, los prelados mexicanos dedican también su agradecimiento al presidente ya las autoridades del gobierno, federales, estatales y municipales, a los bienhechores, a los voluntarios y a todos los que colaboraron en este viaje apostólico.
Como no podía ser de otra manera, también tienen palabras para «los más de diez millones y medio de personas que participaron en las misas, encuentros y vallas», dando ejemplo de que «los mexicanos podemos expresarnos, convivir, celebrar y actuar con orden y responsabilidad». Y su gratitud va del mismo modo para los medios de comunicación, «que hicieron posible que millones de personas siguieran la visita papal en nuestro país y en 140 naciones».
Para concluir su mensaje, los obispos invitan a rezar por el Santo Padre pidió, tal y cómo él mismo les pidió.