Los obispos en Chile reunidos en la 112ª Asamblea Plenaria del Episcopado eligieron a un nuevo presidente para los próximos tres años, monseñor Santiago Silva Retamales, actual obispo castrense del país.
El cardenal Ricardo Ezzati, quien ejerció el cargo de Presidente en los últimos dos períodos, permanece como miembro del Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) en su calidad de arzobispo de Santiago, según lo disponen los estatutos de la institución.
Monseñor Silva fue obispo auxiliar de Valparaíso entre 2002 y 2015. Fue también fundador y responsable del Centro Bíblico Pastoral para América Latina (CEBIPAL) del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM). Sirvió también como secretario general del CELAM entre 2011 y 2015.
Como vicepresidente de la CECh fue elegido monseñor Cristián Contreras Villarroel, Obispo de Melipilla, quien ya ha servido en la institución como Secretario General.
El nuevo secretario general es monseñor Fernando Ramos, obispo auxiliar de Santiago.
También se eligió a monseñor Juan Ignacio González, obispo de San Bernardo, como miembro del Comité Permanente, órgano eclesial encargado de llevar a cabo las determinaciones de la asamblea plenaria de los obispos.
Por su parte, monseñor René Rebolledo, arzobispo de La Serena, quedó como primer miembro sustituto del Comité Permanente; monseñor Héctor Vargas, obispo de Temuco, como segundo sustituto; y monseñor Fernando Chomali, arzobispo de Concepción, como tercer sustituto.
Las nuevas autoridades de la Conferencia Episcopal asumen sus cargos de manera inmediata.
Durante la Asamblea también se eligió a los miembros de la Comisión Pastoral (COP) para el período 2016-2019: monseñor René Rebolledo, arzobispo de La Serena; monseñor Héctor Vargas, obispo de Temuco; monseñor Bernardo Bastres, obispo de Punta Arenas; monseñor Pedro Ossandón, obispo auxiliar de Santiago y monseñor Fernando Chomali, arzobispo de Concepción.
La misión de la Comisión Pastoral, dirigida por el Secretario General de la CECh, es dirigir colegiadamente los organismos pastorales a nivel nacional y ponerlos al servicio de las diócesis, según las directrices de la asamblea plenaria y del Comité Permanente.
Además, dirige el desarrollo de las cinco áreas pastorales del Episcopado: Eclesial, Educación, Agentes Evangelizadores y Comunicaciones.